Como hispano hablantes las dificultades mayores de la lengua
inglesa radican en su pronunciación, su ortografía compleja y
su vocabulario extenso. La gramática inglesa es menos compleja que española,
si bien, como en toda lengua, en inglés hay construcciones difíciles.
El sistema de formación de palabras es también más sencillo
en inglés1. El inglés es más conciso que el
español, por ejemplo, la traducción de una cuartilla del inglés
ocupa más espacio en nuestra lengua. Ahora bien, la sencillez de la gramática
y el carácter más conciso del inglés tienen para el personal
de la salud, ventajas e inconvenientes.
Por ejemplo, la carencia casi total de diferenciación entre los géneros
en inglés evita tener que aprender cada sustantivo en su concordancia
con el artículo y el adjetivo, ya que éstos son invariables, pero
esta misma simplicidad puede dejar en la incógnita la formación
del género en oraciones como: “the new technician has finished
the research”, en la que no se sabe si es el nuevo técnico o la
nueva técnica.
Algunas características del inglés requieren de un especial interés
para los que pretenden hacer una traducción científica, porque
las encontrarán ineludiblemente en sus libros o material científico,
por ejemplo: las frases idiomáticas.
Las frases idiomáticas son típicas y numerosas en inglés
ya que como idioma está en un cambio constante y adquiere lo que se denomina
en lingüística “préstamos del idioma.” La dificultad
en el inglés es que esas frases idiomáticas no son traducibles
directamente a partir de sus componentes2; hay que a aprender a reconocer
cada una como una unidad de sentido y buscar su equivalente en español,
por ejemplo, el equivalente de la frase “to a great extent” tan
leída en nuestras traducciones es: “en gran medida”.
Los verbos de dos palabras, los cuales son frases idiomáticas pueden
resultar difíciles para una mejor comprensión de cualquier traducción,
por ejemplo: “to carry cut an experiment” (llevar a cabo un experimento).
Las formas de la voz pasiva son de uso mucho más frecuente que en español.
Su utilización denota el estilo impersonal para expresar lo que en nuestra
lengua decimos mediante la construcción con SE; se analizaron 10 especímenes,
“10 specimens were analyzed”.
Las palabras análogas engañosas, por su parecido visual con el
español pueden ser causa de errores graves en una traducción ,
por ejemplo: “actually the physician did not realize his error until much
later”, “En realidad el médico no se percató de su
error hasta mucho después”.
Se suele hablar, incorrectamente del “inglés técnico”,
el “inglés periodístico” o el “inglés
literario”, en realidad el idioma es uno solo, pues está formado
por los mismos componentes3.
El estilo científico incluye un uso amplio de terminología específica
de cada ciencia o técnica, teniendo en cuenta que no hay idioma fácil,
ni estilo simple, se puede afirmar que el estilo de la ciencia y la técnica
es para un profesional de la salud, el menos difícil de comprender en
una lengua extranjera, si se compara con otros, tales como el periodístico
o el de la literatura artística.
Lic. Carlos Manuel Quintero Soca.